Vaya con la frasecita…

…del amigo José Fernando

Si queremos que las TIC entren en las aulas, primero habrá que sacar las pizarras.

Desde luego que puede estar equivocado y por supuesto que todo es compatible y, hasta integrable, y compaginable, y prescindible, y …

Pero ahí queda eso para el que quiera comerse el tarro un ratito; pero corto, ¿eh?

10 comentarios en «Vaya con la frasecita…»

  1. De acuerdo, Aníbal.Gracias por la respuesta.

    Y es cierto, como dice la canción «aqui abajo…abajo… hay quienes se desmueren y hay quienes se desviven»

    Sin animos de ponernos llorosos…que el sur también existe.
    Y los educadores de todo el mundo tenemos la obligación de ser esforzados. Nadie enseña lo que no es, les digo a mis alumnos, futuros docentes.
    Y cuando aparece la queja del estilo «por que debo hacerlo yo?» les digo siempre este refrán de la cultura oriental:
    «Si no yo ¿quién?
    Si no ahora ¿cuándo?»
    😉

    Salud también a vos
    Nos leemos
    VeRa

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  2. VeRa, verás ;-), creo que si analizas detenidamente de nuevo la idea de José Fernando, el hecho de haberla recogido aquí, tu comentario y los de José Fernando en su propio blog, aunque no te lo creas, coincidimos en todo.

    Conozco a José Fernando y sé que de manera implícita está considerando un uso constructivo de las TIC, constructivista si me apuras. Hace referencia a las TIC fundamentalmente como un medio que nos facilita hacer que nuestros alumnos construyan y produzcan algo, o procesen determinada información.

    Una vez aceptado esto, que tú y yo compartimos, José Fernando intenta dejar constancia que esa forma de uso requiere un esfuerzo y dificultad que no todo el mundo está dispuesto a asumir y para el que tampoco todo el profesorado está preparado o cualificado. Y en ese dilema nos refugiamos en lo que dominamos y llevamos haciendo durante décadas, pizarra y libro de texto. En ningún momento decimos que esta última sea la peor de las opciones, pero sí la menos apropiada para el «aprender haciendo».

    ¿Ves? hablamos sólo de «sujetos«, aunque sea de manera subliminar 😉

    Gracias por recordarnos que el sur también existe y que en las PC no han llegado a muchísimos rincones del mundo. Esperamos que los numerosos golpes que nos damos a diario con ellas sirvan para que los que vienen detrás puedan hacer mejor las cosas que nosotros.
    Salud!

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  3. Aníbal, si me permites:
    «pero José Fernando intenta, de manera implícita, dejar constancia de que hay profesores, …. que se han agarrado a la pizarra de tal forma que no pueden ….»
    Me fui a ver el post original y nada de eso: el señor se refiere EXPLICITAMENTE a las pizarras. Y lo aclara.

    Es un caso típico de Objeto por encima de Sujeto.
    Quizás José Fernando intuye que quitando el Objeto (pizarra) los profes (Sujetos) habrán de volcarse a las PC.
    Es probable, si las tienen a mano! (eso no sucede en la mayor parte del Tercer Mundo, que curiosa y tristemente es donde más niños hay…)
    Pero el problema NO RESIDE en las pizarras, asi como un uso eficiente y colaborativo de la informatica NO RESIDE en la PC.
    Existen redes sociales y maestros inspiradores desde que el hombre es hombre! El asunto no son los objetos, sino las personas, los sujetos…
    Sin un cambio sustancial, profundo, lento, lleno de pequeñas convicciones que alienten a seguir, no importará que las pizarras estén o no, que las PC estén o no: la educación es una tarea profundamente humana.
    Y también coincido con Queralt:

    «Si queremos que las TIC entren en las aulas, primero habrá que sacar las pizarras, las de tiza y las digitales, porque hacen lo mismo».

    Porque me ha tocado ver aulas repletas de bellas y modernas PC con niños repitiendo hasta el hartazgo fórmulas remanidas, trabajando por debajo de su capital cultural, replicando aburridamente modelos de ofimática sin el menor atisbo de CONSTRUCCION INTELECTUAL… pero! eso si! miraban al frente y habia una rutilante imágen proyectada desde el monocañon

    No nos engañemos, colegas.
    Las pizarras no tienen la culpa.
    Por ende, tampoco tienen la solución

    Saludos
    desde el sur del mundo

    VeRa

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  4. Más que echarle la culpa a las pobres pizarras se la echaría, en parte, claro está, y con matices, al sistema de negocio montado en torno a los libros de texto y a los docentes que están / son esclavos de ellos.
    Pepe critica con acidez el esnobismo y tecnoconsumo asociado a las TIC. No le falta razón pero está claro ya va siendo hora de que algunos docentes se planteen el uso de las enciclopedias en volúmenes, los diccionarios a la antigua usanza, e incluso los atlas. En mi casa siguen teniendo uso, me sostienen el router, y disimulan la miríada de cables que se encuentran tras ellos. En algunos centros se aprovechan para que el proyector de vídeo tenga más altura. (Algún día le enviaré una foto a Aníbal para el apartado «fotografía educativa»)

    Parece sacrílego pero es el siglo XXI.

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  5. ¿Alguien se ha acordado de que los alumnos deben aprender a estudiar y aprender (válgame Dios, qué frase) con los ordenadores?
    Todo el mundo está de acuerdo (creo yo) que en la enseñanza tienen que concurrir (al menos) profesores y alumnos. Los profesores tienen que aprender a enseñar con las TIC y (digo yo que) los alumnos tienen que aprender a aprender con las TIC.
    Y esto pasa por ser un cambio lento, constante y profundo.

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  6. Completamente de acuerdo con Queralt. Demasiada pasión por los gadgets y miradas de estupefacción ante los ingenios electrónicos. Mucho blog, post, web, wiki, wikiweb y yoquésé.com, que ayudarán, no lo niego, pero no son ni de lejos la solución a nada, a no ser para que el gremio profesoral ludopatee un poco. Para que la s Tic entren habrá que hacerles sitio, pero sacar libros y pizarras para dejar entrar el negociete informático de vaciedades y varietés es perderse en el camino. Todo en su justa medida pero no nos volvamos chicos mac.

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  7. Yo la formularía así:

    «Si queremos que las TIC entren en las aulas, primero habrá que sacar las pizarras, las de tiza y las digitales, porque hacen lo mismo».

    Las TIC permiten un replanteo de la enseñanza y el aprendizaje. Si nos limitamos a hacer lo mismo de siempre con las TIC, se verá en colorines, pero se verá lo mismo.

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  8. Sí, Alberto, en eso llevas razón, pero José Fernando intenta, de manera implícita, dejar constancia de que hay profesores, quizás demasiados, que se han agarrado a la pizarra de tal forma que no pueden mirar mucho más allá de sus 2 metros cuadrados.

    Lo que quizás se le haya olvidado en su frase es que junto a la pizarra, a lo mejor tendrían que salir también del aula determinados libros de texto 😉

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  9. La pizarra es y seguirá siendo un recurso sencillo, fiable y barato para enseñar. Tiene la plaza ganada a perpetuidad. Igual que aunque un día los alumnos lleguen a clase con su ultraportátil, los libros y los lápices nunca desparecerán.
    No han llegado las TIC para sustituir a la pizarra clásica sino para ampliar sus necesidades.

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