Las enseñanzas artísticas se están alejando cada vez de nuestros sistemas educativos y son varias las razones que desencadenan esta situación.
- Por un lado creemos que un mayor número de horas de materias como mates o lengua inciden en una mayor adquisición de destrezas o capacidades básicas. Y desde luego, tal y como impartimos hoy en día estas materias instrumentales, yo creo que es hasta contraproducente; pensamos, de manera implícita, que por ejemplo, un mejor dominio de análisis sintáctico o control algebraico desencadena de forma inmediata la adquisición de competencias comunicativas o matemáticas. Pues nuestros curriculums siguen aumentando en horas estas estrategias y nuestros resultados educativos en tests internacionales no mejoran.
- En época de crisis, todo lo relacionado con la cultura en general, y el arte en particular, suele ser la primera pieza a sacrificar.
- El propio planteamiento de las enseñanzas artísticas en nuestro sistema educativo es penosos en muchísimos casos. El fomento de la creatividad y la producción artística brillan por su ausencia, dejando paso a la memorización de la historia de la música o a reproducciones manipulativas de precisión milimétrica.
No voy a decir nada hoy sobre el «aprender haciendo», sobre la forma en la que se adquieren capacidades esenciales para que las personas puedan desenvolverse de manera cómoda en esta jodida sociedad que hemos construido. Lo que sí me parece revolucionario es ponerse a analizar estrategias mediante las cuales las enseñanzas artísticas pueden ponerse al servicio de la adquisición de competencias básicas.
La educación artística puede ser una de las más importantes vías en la adquisición de competencias propias del siglo XXI; en resumen, el pensamiento crítico, la resolución de problemas, capacidades comunicativas y colaborativas, y por supuesto la creatividad pueden ser adquiridas a través de disciplinas como la danza, la música, el teatro o las expresiones visuales.
En P21.org han trabajado sobre ello y nos ofrecen un mapa donde se han estructurado estrategias y ejemplos de cómo esto puede hacerse posible. Para cada una de las competencias esenciales para el s. XXI aportan una definición de la misma y, para cada nivel, incluyen ejemplos de actividades concretas que, relacionadas con las diferentes disciplinas artísticas, pueden desarrollarse en beneficio de la competencia:
Y este mapa es el quinto de una serie de ellos donde se analiza la adquisición de esas competencias pero desde diferentes perspectivas: arte, geografía, ciencia, estudios sociales y lengua (inglesa en este caso). Estoy seguro de que estamos ante algo muy parecido a lo que pueda ser el curriculum del futuro para etapas iniciales y medias de la enseñanza, con una visión de interdisciplinareidad y ámbitos de conocimiento por encima de nuestras manidas asignaturas; y una apuesta en práctica de trabajo por proyectos superando nuestros memorísticos procesos educativos.
Así que cuanto antes comencemos, mejor para nuestro alumnado y, por tanto, mucho mejor para lo que nuestra sociedad actual está demandando.
Me ha encantado esto a ver su cuelgas mas en este fabulosisimo blog.
Por la parte que me toca como profesor de materias artísticas (nunca me gustó lo de DIBUJO, ni lo de EPV, ni… )no puedo estar mas de acuerdo. Son cientos, miles los estudios y cientos y miles las experiencias en distintas partes del mundo que conducen a las reflexiones que planteas. La escuela, el instituto y la universidad -salvo raras excepciones- mutilan enormenmente las posibilidades y el potencial de la educación artística como forma de adquisición de competencias y conocimientos en los currículos educativos. En este sentido el tradicional libro de texto como herramienta y la insuficiente formación didáctica del profesorado en la universidad (en BBAA por ejemplo no nos prepararon para la docencia) conducen a una paupérrima enseñanza artística en nuestro país.
Sin duda , el Arte no cambiará la educación ni el mundo pero puede propiciar cambios, nuevos enfoques , nuevas formas de entender e inteactuar, más allá del lenguaje verbal o el razonamiento científico. Decía el mímísimo Einstein que «en los momentos de crisis, sólo la imaginación es más importante que el conocimiento».
Nadie lo duda, vimos meomentos de crisis no sólo educativas también políticas, mediambientales, morales, etc. Tal vez debamo reconsiderar el sitio que el arte debe ocupar en las escuelas, tal vez….
Gracias Aníbal por el post. Me gustó.
Gracias a ti, Andrea, por tu comentario.
Pues la verdad es que yo ya creo muy poco en que los profesores seamos capaces de cambiar algo; lo siento, pero ando bastante pesimista… 😉
Gracias Anibal por esta entrada. El absurdo sigue siendo que el discurso de los políticos no termine de trasladarse nunca a la práctica. Para muestra, documentos fundamentales como el Mapa de Ruta de la Educación Artística, avalado por la UNESCO (2006), las muchas conferencias de ministros europeos de educación y cultura defendiendo un nuevo modelo pedagógico basado en la creatividad y la participación o aquel estudio coordinado por Key Robinson (el mismo del vídeo) en el que se afirma que el futuro de europa depende de políticas y programas que apoyen el desarrollo creativo y cultural de los jóvenes.
Un pedagogo musical canadiense decía, allá por los años 60, que el primer paso práctico en cualquier reforma educativa es darlo. Quizá seamos nosotros, los profesores, los que tenemos que promover el cambio, desde el convencimiento de que (a pesar de los currículos compartimentados, las editoriales o la lentitud del propio sistema) otra educación es posible.
Saludos y enhorabuena por tu trabajo.
Andrea
Hola:
Ya hay quien se dedica a enseñar ciencias, Matemáticas (Física y Química también) con mucho éxito y de una manera distinta. Los resultados que obtiene el estadounidense Paul Stang residente en la República Checa, son igualmente brillantes cuando enseña a chicos de Secundaria que cuando enseña a adultos preparándose para entrar en la Universidad.
Utiliza Arte, Historia, ocurrencias en la naturaleza así como desvela la utilidad práctica de los conceptos matemáticos que explica en sus clases para, por un lado, captar la atención máxima de sus alumnos y alumnas y, por otro, facilitarles enormemente la asimilación de los contenidos.
Breve reseña en Español al trabajo de Paul Stang («Matemáticas Creativas»): http://www.elartedelamemoria.org/2008/09/16/matematicas-creativas/
Sitio web «Creative Mathematics» (en Inglés): http://mysterymath.wordpress.com/
Un saludo,
Luis
Massimo, el futuro será ese… sí o sí. Ahora bien, los países que antes se den cuenta y comiencen con ello serán los que irán por delante; esperemos que en esto no cojamos el vagón de cola y, al menos, vayamos en alguno intermedio.
Efectivamente, Juanjo, el #IEDA en esto irá de locomotora, no me cabe la menos duda 😉
Ojalá, Marianoh, se comiencen a ver muchos focos innovadores como el que comentas, es ilusionante.
Claro, Muguel, no me extraña que notéis buenos resultados, la incorporación efectiva de las artes a la enseñanza es positiva para el alumnado. Pero esta gente va más allá y su planteamiento nos ofrece trabajar directamente otras competencias desde la perspectiva de la música o la danza. Me parece extraordinario. Infantil es una etapa donde esto tiene muchísimo sentido también, sobre todo porque las competencias relacionadas con desarrollo personal básico son las protagonistas y el arte es el medio más efectivo para ayudar a adquirirlas.
María Jesús, además de esa creatividad que comentas de forma específica para una disciplina de arte, ¿te imaginas también las posibilidades creativas que podría tener la combinación de diferentes disciplinas artísticas? Que poco podemos ver proyectos en los que se combinen creaciones plásticas con musicales o de danza y que a su vez estos tengan presentes otras disciplinas.
Interesantísima la entrada, creo que das en el clavo de lo que necesita nuestro sistema educativo. Los alumnos están deseando crear..sólo hay que propornerlos cosas y rápidamente nos sorprenden. Estamos llegando a un punto en el que, con la disculpa de la disciplina, no los dejamos ni hablar..opinar y expresar sus ideas es crear, decir o hacer una tontería es crear también..Recuerdo una clase de práctica instrumental con los xilófonos (por qué les gustan tanto?? porque pueden crear música dando golpes..es genial!), a un alumno se le ocurrió golpear una baqueta contra otra al ritmo de la música en la introducción y fue una idea maravillosa, la canción mejoró, el alumno se sintió feliz porque su idea que comenzó como una travesura fue aceptada con entusiasmo y el resto de alumnos contentísimos de interpretar la nueva versión..y lo mejor, se contagiaron, todos querían aportar algo. Esta anécdota y algunas más me hicieron pensar en los «hachazos» que damos a su imaginación, yo misma años antes habría dicho: «deja de hacer el tonto y toca lo que pone en la partitura..». Y este creo que es el principal impedimento para educar a través del arte..nosotros mismos, no estamos preparados o no queremos ¿?.
Creo que en nuestro sistema faltan materias donde se unan la creación, la interpretación y la improvisación como Teatro, Expresión corporal, o alguna que se llamara «Taller multicreativo» o algo así.
Viendo el vídeo me he visto reflejada y me he emocionado,la verdad.. me he visto en el instituto oyendo a un profesor decirme «..búscate un hombre rico porque con la música te vas a morir de hambre..» (menos mal que no le hice ni puñetero caso) o escuchar a un compañero decirte «..qué bien os lo montáis los profes de música..si no hacéis nada» o «..qué bien tocan tus alumnos, ya los he dicho que es más importante Música que Historia porque si no encuentran trabajo siempre pueden tocar en el metro»(menos mal que tampoco hago ni puñetero caso..), al contrario, en estos casos pienso..el mundo mecesita más música, más arte, todavía nos queda mucho por hacer ( y alquien lo tiene que hacer no????)
Un abrazo para todos los artistas que trabajan en Educación.
mariajesús
Totalmente de acuerdo,aunque los matices que apunta el compañero sobre el cambio de modelo en selectividad (leáse institutos,etc) marcan, desgraciadamente, el camino.
En nuestro centro trabajamos la música en Infantil con un proyecto de la Fundación Baremboin-Said. Son 3 horas a la semana de música impartida por músicos y coordinados pedagógicamente por los tutores. Después de 4 años apreciamos resultados excelentes en los niños que continúan con nosotros en primaria. Un Abrazo a tod-s y suerte.
Leyendote me acuerdo de los talleres en las escuelas de verano de Madrid en las que parecia que nos ibamos a comer el mundo de las innovaciones educativas en los 80-90 con Paco Hernán (prof. Matematicas) , Javier Carvajal (prof. Plastica) aprendiendo a hacer caleidoscopios y cometas las mate no eran nad sin el arte y lo mismo para el arte que necesitaba a las matemáticas.
Que tiempos….Vuelve la innovación… marianoh
Te estaba leyendo y me estaba acordando con cada frase del Programa MUS-E de la Fundación Yehudi Menhuhin
http://www.fundacionmenuhin.org/programas/muse1.html
Ellos lo llevan más a la educación en valores. Pero los que lo hemos vivido en IES nos damos cuenta rápido del enorme potencial en esta línea que comentas. Dicen por ahí que hay una idea de colaboración entre el IEDA y el Conservatorio que no pretende estar muy lejos de todo esto. Al revés. Y se retomará la cosa en breve 🙂
Estoy totalmente de acuerdo contigo sobre la necesidad de superar la compartimentación en asignaturas y la memorización como fin en si misma y sobre la eficacia educativa del trabajo por tareas integradas.
Sin embargo soy bastante poco optimista como para estar seguro de que éste va a ser el currículo del futuro en nuestro país, por lo menos mientras los estudios iniciales y medios sigan culminando en la selectividad.
Sin contar con las presiones de las editoriales para mantener esos modelos de enseñanza trasnochados con el fin de mantener su modelo de negocio también totalmente trasnochado.
Mientras la Administración no haga bien su trabajo en estos y otros aspectos importantísimos, los profesores y profesoras seguiremos siendo un archipiélago necesitando puentes entre las islas.
Aún no pudiendo evitar este matiz pesimista, estoy convencido de que ése que indicas es el camino, así que: ¡adelante!