El carácter cíclico e inestudiable de los gustos juveniles

Jamás pude entender los motivos que cuando pequeño nos movían a poner de moda determinado juego de calle; de buenas a primeras, como por arte de magia, todos nos poníamos a jugar a las canicas, o a la peonza o a pegarnos pedradas, en períodos de tiempo más o menos cíclicos y estables.

Hoy en día, la juventud no practica esas aburridas costumbres, pero es bastante curioso cómo el carácter cíclico e impredecible de las modas se repite de manera, hoy en día, tecnológica. En mi centro contamos con un programa, iTALC, que entre otras cosas me permite desde cualquier ordenador visualizar lo que cualquier alumno del centro está haciendo en cada momento; SÍ, en mi Centro invadimos su intimidad informática (con conocimiento previo), lo mismo que desde siempre hemos mirado sus cuadernos o pedido que vacíen sus sospechosos bolsillos. Y, evidentemente, lo hacemos por preservar su integridad; prioritariamente, intentamos enseñarles a cuidar de sí mismos en la Red, pero mientras que están en el Centro vamos un poco más allá y nuestros filtros de contenidos, unidos con la sombra del coordinador TIC, procuran mantenerlos lo más alejados posible de cosas que puedan dañarles.

A lo que iba, que en los barridos que realizo cuando tengo un pequeño hueco, he detectado cosas curiosísimas, como la aparición de modas o corrientes en sus gustos por matar los tiempos muertos que son imposibles de estudiar desde perspectivas rigurosas en el ámbito de la pedagogía, psicología o sociología. Desde luego, mis observaciones no pueden ser tildadas jamás de científicas, pero sí puedo asegurar que tener enfrente más de 600 ordenadores en manos de adolescentes me da, al menos, autoridad para escribir esto.

De repente, un buen día, alguien descubre que se pueden unir bolas de colores para evitar que se te caigan encima, y en pocos días casi todo el mundo se dedica a evitar ese desastre descomunal…

juegos 02

Vaya aburrimiento, todos igual, ¿no habrá cosas parecidas?; pues sí, las bolas son completamente desterradas por un habilidoso motorista practicando una especie de trial:

juegos02

Y cuando más pestes me pongo a echar por mis pensamientos (que decirlo no lo hago), sobre la incapacidad imaginativa y constructiva que tienen los adolescentes de hoy a la hora de hacer correr sus tiempos libres, entonces una semana cualquiera empiezo a ver un par de juegos de los que no tengo ni puñetera idea de lo que pueden ser…

«A ver, Ignacio, ¿puedes venir aquí a mi mesa y explicarme qué contra son esas dos cosas a las que tanto tiempo dedicáis?»
La verdad, me quedé completamente perplejo. Resulta que esos chavales (sí, chavales, pues las chavalas prefieren la parte comunicativa de la red) a los que yo creía incapaces de hacer mucho más allá que tumbar algunas bolas de colores, se están dedicando a jugar a un par de mundos virtuales centrados en sendos juegos de red, donde la planificación, la relación con otras personas, el razonamiento y, sobre todo, la estrategia son los ejes fundamentales:

tribalwar

El primero de ellos es Tribalwars, donde los jugadores, personas reales que se cuentan por miles, son propietarios de núcleos de población de la Edad Media donde deben demostrar sus dotes de planificación para buscar fuentes de recursos (minas, etc) o alianzas con otras tribus, de cara a ir haciendo estructuras poblacionales cada vez más grandes y sólidas.

on line football manager

El segundo caso es algo menos potente desde el punto de vista de la utilización de sus recursos mentales, pero no deja de tener bastante interés. En Online Football Manager también compiten con otros miles de usuarios reales, a modo de juego de red, en este caso se convierten en Managers de un equipo de fútbol que deben gestionar de forma inteligente: comprando jugadores, estableciendo metodologías de entrenamientos, dosificando plantillas, participando en ligas, etc.

No esperéis que termine esta entrada diciendo que en los Centros Educativos deberíamos estar apoyando los aprendizajes de los alumnos en ejercicios de rol en el seno de juegos de red. NO!, afortunadamente los pies todavía los mantengo sobre la tierra, aunque sea de 8:30 a 14:00 de lunes a viernes.
Pero tampoco me gustaría cerrar sin afirmar que el conocimiento que tenemos de la realidad de nuestros jóvenes, de cómo piensan, de qué les gusta y, sobre todo, de cómo procesan la inmensa información que les llega permanentemente, es muy escaso.

P.S. Se ruega que no se referencie ningún estudio de la Universidad de Güisconsi, que últimamente ando muy incrédulo con el carácter científico de las ciencias de los procesos pedagogo-psicológico-sociales.

1 comentario en «El carácter cíclico e inestudiable de los gustos juveniles»

  1. Te animo a jugar a juegos como los que citas, yo personalmente me he enganchado al Travian, parecido a Trobalwars. Y qué decir de Puzzel Pirates, donde además aprenden ingléds

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